El domingo pasado planeé ir a patinar a Reforma partiendo desde el Auditorio Nacional hasta Bellas Artes, después ir a desayunar ahí y por último llegar al Museo Franz Mayer ubicado detrás de la Alameda Central.

 Actualmente está la exposición Coming into Fashion, 100 años de fotografía de Condé Nast, la cuál ha tenido una gran inversión en publicidad y una intensa comunicación en redes sociales haciéndonos tener una gran expectativa de la exhibición, pero en realidad te quedas con un mediocre sabor de boca, les voy a decir el porqué.

Empezamos con la sala decorada de pared a pared con el nombre de la exhibición y con 30 portadas “más significativas” de las revista Vogue.  Aquí empiezas a crearte una expectativa mayor, y hace que te emociones por lo que viene a continuación.

En cada etapa se vuelve aburrida y tediosa. En la descripción de la foto solamente colocan año, técnica y fotógrafo. Pero, ¿qué pasa con el nombre de la modelo? O el nombre del diseñador?  Recuerden que es moda y no solamente nos importa la técnica o el fotógrafo sino todo lo que engloba a la foto.  Si quieres tomar una foto a la exhibición, la iluminación está mal colocada, que por donde quieras tomar la foto, cualquier ángulo hace que tengas el famoso “charolazo”.

¿Dónde quedaron los grandes fotógrafos que ha tenido Vogue?

¿Qué pasó con los shootings editoriales más creativas de Vogue?

¿Las increíbles fotografías de Patrick Demarchelier, Herb Ritts y Mario Testino con la colaboración de Grace Coddington, no existen en estos 100 años?

La era de las Supermodelos de los 90´s pasa desapercibida, parece que nunca existió para esta exhibición, solo recordemos que ellas reinaron el mundo de la moda, del cine, de la música y todo el mundo del entretenimiento.

¿Y las portadas de aniversario con todas las supermodelos?

¿Dónde está la portada de Naomi Campbell al ser la primera modelo de color en salir en la portada Vogue?

Anna Wintour fue la primera en reconocer que la era de las Supermodelos se venía para abajo y empezó a colocar a actrices y cantantes, ¿Por qué no colocaron ni una portada?

Ha salido Hillary Clinton y Michelle Obama ¡Qué pasó!

Condé Nast se quedó corto, ¿corto?, cortísimo. No sé quién fue él o la que seleccionó las fotos. Lo único que me hizo acelerar mi corazón fue la portada de las Supermodelos Con Cindy, Linda, Naomi, Tatjana y Christy.

¿Qué hace Justin Bieber en la exhibición?

¿Dónde quedó las portadas del September Issue?

Recomiendo a Condé Nast y al museo Franz Meyer que pongan la entrada libre, sin costo alguno. Es una exhibición mediocre, aburrida y muy corta.

Y como dice Heidi Klum en Project Runway: 

                                                                  auf wiedersehen! ósea adiós!